domingo, 16 de mayo de 2010

Nana del hijo del pescado

Hoy tu padre se ha dormido
en olas de espuma blanca,
ya nunca pondrá sus labios
sobre tu frente de nácar.

En el mar de tus ojitos
se refleja la amargura
mientras tu madre musita
una nana con ternura.

Te voy a hacer un moisés
con la forma de un barquito
para que duermas y sueñes
sirenas y pececitos.

1 comentario:

Unknown dijo...

La vida de pescador es incierta cuando se hace a la mar, sus versos traen dulzura a esa realidad.

Quise seguir su blog pero no encontré como. Y es que sus poemas son bellísimos, por favor permítame invitarlo a los míos, quizás se anime a pasar por allí.

Maricruz Díaz