domingo, 23 de mayo de 2010

Nana para el niño que dormía
a su hermanito

En una choza de juncos,
sentadito en una piedra,
estás cantando una nana
para que tu hermano duerma.

Su madre ya está en el cielo,
se fue con la primavera,
el niño de cinco añitos
está llorando de pena.

Duérmete, hermanito mío.
Aunque la noche es cerrada,
la iluminará un lucero
al escuchar esta nana:

“Mí niño se está durmiendo
en una cuna de plata
y sueña que es bucanero
con grandes barbas doradas.

En un bajel de ilusiones
ha de surcar la mañana
para conquistar las islas
de piñones y avellanas”.

1 comentario:

Isa dijo...

me encanta como pasas de describir una imagen tan triste, como lo es la del niño que intenta dormir a su hermano acunándolo, arrastrándolo entre las nanas a un sueño con barcos donde no note la tristeza que les envuelve.
me parece muy tierno.